MÍMULO
Cómo debe ser un médico con sus pacientes

La desolación del paciente. Cómo debe ser el «médico del presente» según el Dr. Edward Bach.

No sé si a ti te ha pasado alguna vez, a mí, lamentablemente, varias. Te cuento.

La situación es la siguiente: Te encuentras mal de salud, acudes a la consulta del médico, describes tus síntomas lo mejor que puedes,  y sales cinco minutos después con un montón de papeles, una lista de pruebas por hacer, la cabeza a punto de estallar,  y te das cuenta de una cosa: Que tu médico no te ha mirado a la cara NI UNA SOLA VEZ desde que entraste al consultorio. DESOLACIÓN, esa es la palabra que describe lo que sientes en ese preciso momento.

Tampoco sabes que es lo que tienes porque…”hay que esperar a los resultados” y porque tampoco has podido intuir en la mirada del médico, si estabas tan grave como para ir haciendo el testamento (permitidme el giro humorístico, es para quitar tensión a la situación).

Ahora te invito a que viajemos a la Inglaterra de 1900, porque el Dr. Bach ya (en esos años), había percibido cierta deshumanización de la medicina, observando que algunos de sus colegas médicos ya no miraban a los ojos del paciente, vamos, que esto es de primero de medicina: Antes de escuchar al enfermo: ¡OBSÉRVALO! , pero a veces se olvida, que le vamos a hacer… el ser humano es imperfecto.

Edward Bach en su conferencia del 18 de octubre de 1929 en Londres, percatándose de esa “desagradable costumbre de algunos médicos”, ya describía a sus colegas cómo debía ser el “médico del futuro”, reproduzco unas líneas que serán reveladoras (tened en cuenta que estamos hablando de principios del  siglo XX)

“El médico del futuro tendrá una VISIÓN Y UNA COMPRENSIÓN MUY AMPLIAS, habrá estudiado la naturaleza humana de cerca, a fin de ser capaz de AYUDAR y dirigir al paciente”

“El médico del futuro deberá señalarse dos metas: La primera será ayudar al paciente a conocerse a sí mismo y señalarle los errores que pueda estar cometiendo”.

“Es preciso que sea un GRAN ESTUDIOSO DE LAS LEYES QUE RIGEN A LA HUMANIDAD ASÍ COMO A LA NATURALEZA HUMANA, de modo que pueda reconocer en los pacientes aquellos elementos que están provocando un conflicto entre el alma y la personalidad. Deberá ser capaz de aconsejar al paciente sobre la mejor forma DE RECUPERAR LA ARMONÍA…”

“El segundo deber del médico será administrar remedios que puedan ayudar al cuerpo físico a recuperar sus fuerzas y asistir a la mente para que recobre la calma. Todos estos remedios se encuentran en la naturaleza para la curación y el bienestar de la humanidad”

Gracias a su gran vocación, y a su fiel convicción de que el “médico del futuro” debía ser un gran conocedor de la naturaleza y de la naturaleza humana, logró crear un método terapéutico tan sencillo como eficaz, basado en lo que nuestros antepasados más remotos utilizaban para sanar, LA MEDICINA DE LA NATURALEZA.

Ahora os toca a vosotros: ¿Creéis que se han cumplido los preceptos del Dr. Bach? ¿Creéis que los “médicos de ahora” tratan a sus pacientes como un “todo” y que además de tratar los síntomas, procuran lograr el equilibrio mente – cuerpo de los pacientes?

Particularmente, quiero pensar que sí, soy positiva por naturaleza, aunque a veces me lleve alguna que otra decepción…

Me encantaría leer vuestros comentarios. ¿Empezamos una charla? Os espero…

Abrazo al corazón, Nora.